CARTONES
Los cartones son ligeros, efímeros casi, su color es mate y su superficie porosa e irregular. No tiene brillos y admite pastas o pintura con brillo aunque la apaga. Su ligereza y suavidad me valen para expresar lo más sensible, lo ligero, lo más vulnerable que hay en mi, lo más intimo de mi misma o de alguien. Sobre ellos quiero siempre plasmar lo más oculto, lo más etéreo: un olor, un sabor, una depresión, sentimientos ocultos, lo más mental de nosotros.
Lo más simbólico. La simbología que cada color tiene para mi, la utilizo en forma de líneas o pequeñas manchas. Sobre ellos me gusta pintar con pigmentos, su acabado es mate y aterciopelado. Puedo crear “heridas” sobre su superficie, lo hago más “encarnados”… Aunque al final su aspecto es de fragilidad. La fragilidad de nuestra propia existencia como ser vivo.
